El increíble rescate de Paulina Gómez el 19 de septiembre de 2017
"Ya, chaparrita, estás afuera. Venga, Pau, bravo, venga, vas a ver a cuántos vas a invitarle la cena ahorita, Pau".
Estas fueron las palabras de un rescatista al momento de sacar de entre los escombros del edificio de Álvaro Obregón 286 a Paulina Gómez, una de las últimas personas socorridas en la colonia Roma.
Fueron tres rescatistas que llegaron hasta abajo para sacarme, uno movió escombro, otra doctora me entablilló el pie y ya el último fue el que me jaló ya para arriba", relata Paulina Angélica Gómez Huerta.
Con un bastón que le ayuda a caminar por los estragos de una fractura en el tobillo, recuerda las horas atrapada.
"Cerca de mí no vi a nadie ni herido ni muerto y fue una impresión saber que tanta gente estuviera así, porque nada más se oían lamentos pero quedé muy atrapada en un cuadro de piedra".
Al salir de los escombros fue llevada a la Cruz Roja de Polanco donde la operaron.
Su madre, que llegó a buscarla a Álvaro Obregón 286, dio con ella dos días después,
"Ya habían decidido irme a encontrar al Semefo pero ya casi para ir ahí se notificó que si estaba ingresada a Cruz Roja de Polanco".
Visitar ese lugar le mueve el corazón y la mente, ahí murieron 49 personas, 39 de ellos compañeros.
"Ha sido duro, ha sido un año de duelos, sobre todo tantos compañeros que se fueron, era gente apreciada para mí, mis jefes. La rehabilitación del pie ahí va"
Paulina no tiene trabajo, pero espera que su suerte cambie cuando se cumpla el primer aniversario del sismo del 19 de septiembre de 2017.
Con Uno, Gustavo Castillo.